jueves, 20 de diciembre de 2007

MONARQUIA


A raíz de la inofensiva caricatura de los príncipes en El Jueves, se han venido sucediendo actuaciones de rechazo a la monarquía, contestadas con mayor o menor contundencia por la judicatura, el gobierno y hasta algún meapilas ex-comunista con pretensiones de locutor radiofónico ha aprovechado para hacerse notar.

Resultan anacrónicas, irracionales y contrarias al espíritu constitucional las prebendas de las que goza el rey y toda su parentela al que se le atribuyen, en nuestra reciente historia democrática, unos méritos de dudosa legitimación . De cualquier manera eso no puede preservar in aeternum el mantenimiento del cargo que ostenta ni la perpetuidad de su casta, la graciosa asignación del Estado, el oscurantismo de sus negocios o el incuestionable carácter sagrado e intocable de su estatus.

Actualicemos nuestras instituciones a los principios racionalistas y democráticos dejando atrás viejos prejuicios de sumisión, oscurantismo e ignorancia y permítannos, cuando menos, elegir al rey cada cuatro años. Yo dudo entre darle mi voto al Dioni o a Chiquito de la Calzada.

En Pamplona/Iruña a 20 de diciembre de 2007
Juanito Monsergas

MENSAJE IRREAL


Españoles y expañoles:

En este año que concluye y en el que muchos de vosotros me habéis demostrado vuestra adhesión más o menos ardiente, no han escaseado preocupaciones y desvelos ni contrariedades y desencuentros, pero habiendo respondido con valentía y tesón, no ha de faltarnos en el futuro afán de superación: nuestros problemas aún pueden crecer.

El incremento patrimonial de los hogares españoles se ha visto catapultado, en algunos casos, hasta cotas de progreso y riqueza difíciles de imaginar y, en la mayoría, de constatar. Además, y pese a la amenaza de la burbuja inmobiliaria, estamos a la cabeza de Europa en superficie construida, abastecimiento de billetes de quinientos y en desertización galopante, lo cual nos viene muy bien para compensar nuestros bajos índices en educación, circulación vial y aprovechamiento laboral.

Esta vitalidad de la que hacen gala las finanzas españolas, no puede empañar nuestro compromiso con las resoluciones internacionales en defensa de la sostenibilidad del planeta y debemos implementar esfuerzos y recursos en aras de legar a las generaciones venideras, si no un medio ambiente pulcro e impoluto, por lo menos un tercio legionario con uniforme de gala.

Son precisamente los escolares que hoy bregan con el sistema educativo, los que han de conformar la España del mañana, siendo por ello imprescindible colocar la enseñanza en el lugar que le corresponde y, dado que todo logro precisa de su correspondiente esfuerzo y sacrificio, pondremos los medios necesarios para conseguirlo, aunque para ello tengamos que reducir (aún más) el presupuesto.

Siendo las instituciones diplomáticas y los foros parlamentarios la base angular del estado de derecho, han de procurar servir de ejemplo a los distintos agentes sociales para la resolución de los conflictos, compaginando sensibilidades, pareceres y empatías con un adecuado proceder intelectual: un cabezazo a tiempo vale más que mil palabras.

En Pamplona/Iruña a 20 de diciembre de 2007
Juanito Monsergas

sábado, 15 de diciembre de 2007

PARAISOS FISCALES


El dinero no tiene fronteras. Ahora menos que nunca. Las fronteras son para los pobres. Otra cosa es el parné, que ése sí que viaja que da gusto por todo tipo de países en forma de efectivo, divisas o apuntes cibernéticos. Por si ello no fuera suficiente facilidad, existen los paraísos fiscales, lugares donde se ocultan y limpian capitales de todos los colores.

Y no se piense que son sólo pequeñas islas o plataformas petrolíferas ancladas en medio del mar, que también existen paisitos de escaso territorio, enormes tragaderas, mucha corrupción y dependientes de otros muy democráticos estados, y que dicen respetar las normativas internacionales: hablo de Mónaco, Andorra, Gibraltar, Luxemburgo, San Marino, Malta, etc.

¿Por qué los organismos financieros internacionales admiten transacciones con estos piratas económicos? ¿Acaso no es posible ponerles veto a estos chiringuitos fraudulentos y dejarlos fuera del sistema bancario internacional? ¿No existe un consorcio llamado SWIFT (precisamente radicado en Bruselas) por donde pasan todas las transacciones internacionales para poder controlarlas? ¿Quieren hacernos creer que el dinero proveniente de las operaciones crematísticas ilegales no se mezcla con el resto de caudales hasta convertirse en una amalgama cuya licitud es imposible dilucidar?

Nos puede parecer que todas estas consideraciones no nos afectan a las personas de a pie y que son cosa de grandes mafiosos perfectamente delimitados. Sin embargo, todos los sectores económicos deben dirigirse a los mercados financieros para conseguir capitalización: los estados para financiar su déficit, las empresas para desarrollarse, los particulares para conseguir bienes de consumo, de vivienda, de jubilación, etc. Ya en 1995 (y el trasiego no ha parado de crecer) se transferían 1,3 billones de dólares al día en los mercados de cambio: 5 veces el presupuesto anual del estado francés y 70 veces las exportaciones mundiales diarias de bienes y servicios.

Esta Europa de cuentas numeradas, de enjuagues de billetes y de ingeniería financiera es utilizada por organizaciones criminales asegurando la impunidad de los defraudadores, mientras la gran mayoría de los ciudadanos temblamos con el repunte del euribor.

Los políticos nos aseguran que la economía va bien y nosotros les volvemos a votar como quien, preocupado por la bancarrota, se gasta sus últimos cien euros en lotería pensando que le va a tocar.

En Pamplona a 16 de diciembre de 2007
Juanito Monsergas

LEER Y COMPRENDER


Nuestros escolares no leen y cuando lo hacen no entienden lo que pone. Con los recortes presupuestarios en educación, la consideración en que tenemos a los educadores, los continuos cambios en el sistema pedagógico producto de las desavenencias políticas de nuestros gobernantes y la escasa calidad de algunos libros de texto, cuyas editoriales descuidan su confección al tener asegurada su venta, no es de extrañar que el nivel de nuestra enseñanza esté a la altura de Kazajstan.

El fastuoso proyecto Atlante (mucho nombre y poco contenido) pretendía que la chavalería hiciera resúmenes de 30 líneas en vez de 10, leyera 6 libros en vez de 3 e incentivara la comprensión lectora de los jóvenes. Pero ¿cómo? No se establecían medidas para hacer bibliotecas en las escuelas, ni se planteaba contratar profesores de apoyo para digerir al nuevo alumnado emigrante o apoyar a los que tenían más dificultades. Voluntad sin medios.

Los niños no leen. ¿Acaso los mayores lo hacemos? Y cuando traspasamos el escueto titular de un periódico reducido a su mínima expresión (gratuito no sólo en su precio), ¿comprendemos lo que dice? Confieso que de las declaraciones de nuestro florido arco parlamentario, no me entero ni jota y cuando creo haberlo entendido, compruebo días más tarde que, de lo que decían, la mitad y al revés.

No obstante, pienso que las familias podemos ayudar a la formación de nuestros hijos y es por ello que alecciono a mi hija para que utilice la cabeza y busque sin descanso la razón. Compruebo con satisfacción que mis consejos no han caído en saco roto: la peluquera le ha dejado un pelo horrible y en el kiosko, el periódico de Ansón, se había agotado.

En Pamplona/Iruña a 15 de diciembre de 2007
Juanito Monsergas