viernes, 14 de octubre de 2011

TIMONEL


Hace ya una década que el presidente del Gobierno de Navarra nombró al timonel que se ha encargado, junto con su equipo directivo, de guiar los derroteros del “buque insignia” de la economía foral: la CAN.


Enseguida dejó ver su estilo: remodeló íntegramente la imagen corporativa de la entidad que parecía augurar un camino diferencial y autónomo, aunque pocos años más tarde se diluyó en lo que se ha dado en llamar Banca Cívica. Nuevas fusiones vendrán que borrarán aún más la marca.

Pre-jubiló a gran parte de la plantilla, a pesar de que inició un plan de expansión que le llevó a efectuar un montón de contrataciones. Ignorando la dimensión e influencia natural de la Caja, acometió una expansión desorbitada, abriendo en pocos años más oficinas fuera de Navarra que las que había dentro, hasta el punto de estrenar a bombo y platillo (y con la presencia de la infanta borbona) su flamante sede en Whasington. Se jactaba de abrir una oficina a la semana, pero no parece tan locuaz cuando cierra cuatro en un día.

A día de hoy, la mitad de las oficinas han sido cerradas y la otra mitad (y alguna más) deberán llevar el mismo camino si se pretende consolidar las que resulten rentables. Por cierto, el local portentoso que nos iba a llevar a exportar la re-descubierta Obra Social de la CAN allende los mares, sigue sin permiso para operar. No estaría de más saber el coste en dietas, viajes, sueldos y dedicación de sus ejecutivos en tan quimérica punta de lanza. Lo cierto es que la CAN ha vendido, en esta alocada carrera, la totalidad de su cartera y gran parte de sus inmuebles.

Ahora lo que está en peligro es su (tan cacareada por el staff directivo como ignorada por la sensata clientela) TU ELIGES, TU DECIDES que, consecuencia de convertirse en sociedad accionarial, está cada vez menos garantizada y no se descarta su completa desaparición.

El incremento de puestos directivos, prebendas, regalos y parabienes repartidos en estos años a su alrededor, con la alegría que da manejar dinero ajeno, le ha llevado a perpetuarse en el puesto y a co-dirigir el nuevo banco, a pesar de tener que acudir primero al FROB y luego sacar la entidad a Bolsa (minusvalorada todavía más) para recapitalizarse.

Atrás quedaron los tiempos en que sus directivos compraban locales a troche y moche por la geografía peninsular (justo antes del estallido de la burbuja) o las alianzas estratégicas con el Wachovia de las que no se conoce resultado. Sin embargo, chiripitifláuticos inventos como Savialogos, tan caros como improductivos, siguen celebrándose para concluir en lo obvio.

Pues bien, tal cúmulo de quebrantos no parece ser impedimento para que el sagaz timonel se multiplique el sueldo hasta los tres millones y medio anuales como co-presidente de Banca Cívica (junto con el de Cajasol, que se lleva otro tanto), además de blindajes, dietas, pluses, alojamientos, desplazamientos, etc, etc, etc. Una buena forma de premiar el atrevimiento, la irresponsabilidad y el despilfarro de este ejecutivo, cuyos emolumentos multiplica por doscientos el sueldo del empleado que, paciente y profesionalmente, le atenderá la próxima vez que vaya usted a una ventanilla de la CAN.

Suyo afectadísimo:
Juanito Monsergas

lunes, 3 de octubre de 2011

Preparados, listos... y “enteraos”

La asamblea de majaras ha decidido: mañana sol y buen tiempo.

La sexta edición de Savialogos ha reunido en Pamplona a 53 “expertos” (de los que sólo 3 eran “expertas”), para ponderar sobre el estado del bienestar, ése que, día sí y día también, amenazan con poner en venta los gestores de la cosa pública para pagar el agujero propiciado por banqueros (que no bancarios) y especuladores.

El evento, pagado por Caja Navarra Banca Cívica, ha dictado conclusiones tan bien intencionadas (aparentemente) como carentes de utilidad:
“los mercados deben ser eficientes porque si no se convierten en perversos”. ¿Tiene eso algo que ver con la ingeniería financiera (hedge founds, trasiego de activos, fondos y productos en general de dudosa calificación) que han practicado las entidades bancarias con el consentimiento del Banco de España y los ministerios de Economía de los últimos 20 años, la descapitalización de cajas y bancos y los escandalosos sueldos de sus directivos?

“Los políticos deben tomar decisiones valientes sin mirar el coste electoral”. ¿Se refieren los sabios economistas al autismo gubernamental y el “buen hacer” de las comunidades autónomas en la descentralización de la gestión del suelo que ha provocado la burbuja inmobiliaria, las hipotecas asfixiantes y el endeudamiento de la población hasta límites insostenibles y el posterior rescate bancario a costa de recortar educación, sanidad, etc?

Para otro de los enterados, sabedor de que el rayo de Yhavé no cae donde debiera,
“el contexto económico favorece la limpieza de las malas prácticas empresariales”. Cuando se instauró el euro, los gurús financieros no se cansaban de repetir que no se incrementarían los precios y que la moneda única haría aflorar todo el dinero negro existente en el mercado: los precios se duplicaron en un par de años y la economía sumergida no ha parado de crecer, generalizándose el pago en B y la utilización de los paraísos fiscales, siendo la mayor parte de las transacciones que funcionan por el mundo especulativas, sin ninguna conexión ni con bienes ni con servicios.

La guinda la ha puesto el anfitrión del sarao, animando a
“convivir con el cambio y aprovechar las oportunidades para no ser devoradores por el cambio sino hacer el cambio”. Groucho Marx no lo hubiera explicado mejor. Debe de referirse al cambio de puesto y consiguiente aumento retributivo que le hace enrique_cerse (al alimón con el otro copresidente de la Banca Cívica) tres milloncetes y medio anuales, amén de otros blindajes y prebendas. Será por los éxitos conseguidos...

Suyo, afectadísimo:
Juanito Monsergas