lunes, 26 de enero de 2015

DEUDAS Y DUDAS


No puedo por menos que felicitar a nuestra sagaz y astuta Presidenta de Navarra por el éxito alcanzado en el asunto del IVA de la Volkswagen y la negociación con el Gobierno Central del Convenio Económico, en el convencimiento de que su buen criterio, ponderación y saber hacer ha resuelto una situación que, a todas luces, se prometía complicada. No obstante me queda alguna pequeña duda que, aprovechando estas líneas, me gustaría compartir.

La primera se refiere a cómo es que, si (desde 1994) el sistema de que Navarra cobrase unos impuestos que el Estado tenía que devolver después, era correcto, legal y conocido por los distintos gobiernos de los últimos 20 años, la Agencia Tributaria haya mantenido la reclamación desde hace un par de años amenazando con ejecutar una deuda que podría hacer quebrar el viejo Reino.

La segunda es la inexplicable y repentina desestimación de Hacienda en el cobro de esos 1.500 apetitosos millones en litigio que, en estos tiempos de reajustes y recortes, bien pudieran tapar alguno de los múltiples agujeros que, desde hace años, amenazan nuestro “Estado del Bienestar”. No sólo eso, sino que “papá Estado” va a seguir devolviendo más de 250 millones anuales que la Hacienda Foral cobrará y por los que tan sólo deberá compensar 25 millones al año hasta la próxima revisión del Convenio Económico.

Visto lo visto, queda claro que Navarra no tiene capacidad recaudatoria suficiente puesto que ha de ser financiada por el Gobierno Central y por tanto, difícilmente se puede hablar de autonomía, quedando a la buena o mala voluntad de Madrid para que “la espada de Damocles” caiga sobre nuestras arcas y nos lleve a la quiebra.

Todos aquellos años en que se ponía nuestra comunidad como ejemplo de milagro económico, la autonomía más deseada, próspera y rica, envidia de todos los contribuyentes y paradigma de buena administración donde utilizábamos la autóctona txistorra para atar los perros, se convierte en una frágil autonomía que puede perder un tercio de sus ingresos sin comerlo ni beberlo, por obra y gracia de la interpretación que pueda (o quiera) hacer cada 5 años el gobierno estatal de turno o por la decisión de la multinacional de exportar sus coches desde aquí.

Parece claro que no tenemos la suficiente autonomía fiscal para funcionar por nosotros mismos y vamos a tener que buscar otra comunidad autónoma, con cuya unión aumente nuestra capacidad recaudatoria. Paradójicamente, tras la tan cacareada por usted y su grupo “amenaza vasca”, ahora resulta que es la comunidad del País Vasco nuestra mejor opción de futuro dada su solvencia, tejido industrial, capacidad, desarrollo humano y tecnológico y cercanía territorial, social y cultural. Precisamente es la Transitoria IV la que puede convertir a nuestra comunidad en una autonomía lo suficientemente fuerte para aguantar los embates futuros, por no hablar de la posibilidad de arrebatar a Vitoria/Gasteiz la capitalidad de la futura autonomía. A fin de cuentas, presidenta, lo único que vamos a tener que hacer es pelearnos con el Nor Nori Nork. ¿O no?.


Suyo, afectadísimo: Juanito Monsergas

CARICATURAS


A raíz del atentado contra la revista Charlie Hebdo se han proclamado una infinidad de mensajes solidarios más o menos sinceros y oportunistas y se ha desatado un debate sobre libertad de expresión, límites morales e incluso censura a cuenta de los dibujos y críticas mordaces hacia la religión. Hacia todas las religiones.

Los musulmanes europeos han rechazado los asesinatos, pero han dejado ver su malestar por permitir que se publiquen unas caricaturas que constituyen una grave ofensa por no respetar los sentimientos y símbolos de los musulmanes. También muchos occidentales han mostrado que “no son Charlie” al afirmar que ese tipo de publicaciones y sátiras no deberían estar permitidas e incluso la máxima autoridad de los católicos ha dicho al respecto que entiende que alguien lance un puñetazo cuando se le menta a la madre.

Sin embargo la religión pide para sí algo que no está dispuesta a dar: yo no le pido que maltrate al objeto de su veneración, lo que le pido es que no me obligue a respetar una creencia que puedo considerar absurda. El exterminio de miles de personas con bombas de hidrógeno por parte del dictador Xenu no creo que sea motivo de risa para un cienciólogo; el paraíso rodeado de huríes puede ser lo más sagrado para un musulmán y un dibujo de Mahoma lo más ofensivo; según los cristianos, dios creó al hombre del barro, a la mujer de una costilla y su hijo nació de una virgen; si el dios que tanto quiere a Abraham le pide que mate a su hijo Isaac sus razones tendrá, lo mismo que cuando pide circuncisiones y ablaciones...

Lo que cada uno quiera creer en su fuero interno o de puertas adentro, me guste o no, tendré que aceptarlo pero no pueden obligarme, como escéptico que soy, respeto por sus dogmas. Precisamente son las religiones, y especialmente los monoteísmos, los que tratan a las mujeres como seres inferiores, no aceptan la teoría científica de la evolución humana, niegan la muerte y prometen una felicidad plena más allá de ella, manipulan a sus adeptos (también las mentes infantiles) con martirios e infiernos cruentos y despiadados, esquilman a sus seguidores con todo tipo supercherías y continuamente afloran sectas y corrientes que reinterpretan los libros sagrados pero, lejos de adaptarlos a los nuevos descubrimientos, los utilizan para seguir justificando su fundamentalismo ajeno (y muchas veces contrario) a los principios racionales de libertad, igualdad y respeto a los derechos humanos universales, base de nuestras sociedades democráticas. Eso cuando no incitan a la "Guerra Santa".

Como decía el director del semanario agredido, al plantearnos la cuestión de si tenemos derecho a dibujar o no a Mahoma, de si es peligroso o no hacerlo, la cuestión que vendrá después será si podemos representar a los musulmanes y después nos preguntaremos si podemos sacar seres humanos y al final no sacaremos nada más y el puñado de extremistas que se agitan en el mundo y en nuestro país habrán ganado.

Si vuestras creencias implican una falta de respeto y tolerancia respecto a mi ideología y mis libertades no merecen mi respeto. El respeto se gana, no se pide, ( y mucho menos se exige). “No hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti, ni te hagas a ti lo que no le harías a los demás” (Confucio).


Suyo, afectadísimo: Juanito Monsergas
 

miércoles, 21 de enero de 2015

SATURACIÓN


No digo yo que el Casco Viejo sea el único barrio de Pamplona que sufre las consecuencias de la contaminación acústica y las molestias producidas por el ocio nocturno los fines de semana pero, debido a sus particulares características y siendo el destino de turistas como centro neurálgico, social y emblemático de la ciudad,  merece un tratamiento especial.

Bien está que, tras el hartazgo y desesperación de una parte sustancial del vecindario, la Corporación Municipal tome la determinación de revisar la normativa municipal respecto a los establecimientos de hostelería (que ya tuvo declarado el Casco Viejo zona saturada de bares durante muchos años) pero, dada la situación de dejadez de la que ha hecho gala los últimos años, me temo que va a tener una ardua y laboriosa tarea.

De todas formas, celebro que el Ayuntamiento se decida de una vez a intentar poner coto a un desaforado ocio alcohólico de fin de semana que convierte el Casco Histórico en un macrobotellón, limitando la concesión de licencias, exigiendo el cumplimiento de la normativa tanto de las infraestructuras como de la clientela, delimitando la instalación de terrazas que respeten las dimensiones de la calzada y la circulación vial, vigilando la venta de bebidas alcohólicas (también a menores) en locales sin la pertinente clasificación de bares a altas horas de la madrugada, acotando el aforo tanto en el interior como en el exterior de los bares, velando porque se respete el horario de cierre e impidiendo las conductas incívicas, insálubres y vociferantes que poco tienen que ver con el ocio y mucho con el gamberrismo más excesivo, ante la inexplicable desaparición de la Policía Municipal durante la noche. Recursos y dotaciones tiene el Ayuntamiento para hacer cumplir las normas.

Se corre el peligro, también, de que las escasas calles que tienen pocos o ningún bar (que alguna queda aunque tampoco estén libres de alboroto, orines y griterío bien entrada la noche) vean florecer nuevos locales y, mientras no disminuya la densidad de bares, creo que habría que replantearse seriamente el volver a considerar todo el barrio como zona saturada.

El año 2009 el área de Comercio y Turismo declaraba el Casco Viejo saturado de entidades bancarias e insistía en no dejar abrir más oficinas a menos de 100 metros de otra ya existente, ya que resultaba “fundamental” preservar su tejido comercial y que dicha concentración rompía “la continuidad en la deseada trama comercial dificultando la consolidación de la zona como un gran centro comercial urbano".

Algunos podemos pensar que una oficina bancaria es mucho más perniciosa, peligrosa e incluso puede resultar más molesta  que un bar, aunque no sé si opinarán lo mismo los vecinos de San Nicolás, Navarrería, Estafeta...

Suyo, afectadísimo: Juanito Monsergas

jueves, 8 de enero de 2015

DIOSES Y BESTIAS


En el nombre de Alá, el compasivo, el misericordioso, creador de todas las cosas y fuente inagotable de sabiduría, omnisciente y eterno, infinitamente poderoso, has cargado el kalashnikov con balas bendecidas por quienes dicen ser intérpretes de mis palabras, para lavar mi nombre, sin darte cuenta de que mi nombre no hace falta limpiarlo porque ya es puro, está por encima de todas las cosas y ningún mortal lo puede ensuciar.

Tu soberbia te hace erigirte en mi defensor como si yo lo necesitase y como si unos simples monigotes pusieran en peligro mi integridad, mi palabra y mi razón, como si una simple broma pudiera tambalear mi autoridad ¿Tan débil me crees como para verme amenazado por una simple caricatura?

¿Piensas que te prefiero mezquino, ruin, vengativo? ¿Acaso crees que necesito de tu insignificante odio para reafirmar mi grandeza? ¿Por qué no diriges tu ira contra quien te expulsó del lugar que te vio nacer y se niega a compartir la riqueza de la tierra, sumiéndote a ti y a los tuyos en la pobreza, en la ignorancia y en la insalubridad? ¿Por qué arremetes entonces contra tus vecinos que, probablemente, están tan jodidos como tú y, si tienen alguna responsabilidad en la marginalidad a la que te someten, esos no son los blancos de tu fusil?

Quizá pienses que segando la vida de los que, armados con la pluma y la palabra, son capaces de reírse de todo y de todos, ellos incluídos, utilizando el humor para arrancarnos una sonrisa y haciendo este mundo un poco más habitable, me honras. Has de saber que, si realmente piensas que mis enseñanzas son la verdad y la vida, huelga la fuerza para que triunfen. Las armas se utilizan cuando fallan todos los argumentos, cuando ya no hay razones y matando en mi nombre me envileces. Olvídate del Edén pues tan sólo has contribuido a convertir este mundo en un infierno. Esa es toda tu contribución.

Has de saber, pequeño necio, que el amor y no el odio es lo que engrandece a las personas. Y no hay mayor expresión de amor que hacer reír a los que nos rodean. El humor, el chiste y la ironía no suponen ninguna afrenta a la verdad puesto que la risa es el lenguaje de los dioses. ¿Acaso has conocido a alguna bestia con sentido del humor?

Suyo, afectadísimo: Juanito Monsergas
(chupatintas diplomado y, en los ratos libres, dios)