lunes, 8 de junio de 2009

PATRIMONIO INMATERIAL


Que los sanfermines son una de las siete maravillas de la humanidad, paradigma de la quintaesencia, máxima aspiración de la excelencia del mundo mundial ya lo sabíamos, así que no nos sorprende que se hayan declarado candidatos a ser uno de los 10 tesoros del Patrimonio Cultural Inmaterial de España, junto con la virgen del Pilar, la leyenda del lagarto de la Malena o el txistu vasco. Aquí también tenemos txistu e incluso gaita (¡y menuda gaita!), pero tampoco es cuestión de avasallar. Algo habrá que dejar a las provincias...

Lo que no me cuadra demasiado es eso de inmaterial. ¿Son nuestras entrañables fiestas cosa del espíritu evanescente o pertenecen a la pantagruélica dedicación de los groseros excesos carnales? ¿Supera el misticismo del culto al santo afroamericano la ruidosa y populachera vorágine de bacanales etílico-gastronómicas de esos días? ¿Pesa más la devoción y el etéreo sentido lúdico del festejo que las toneladas de basura generadas, los miles de kilolitros de orines desparramados por la ciudad o el pestilente aroma que ambienta la celebración de tan Inmaterial Patrimonio Cultural?

De cualquier manera, dicho reconocimiento no puede sino engrandecer aún más nuestra idiosincrasia diferencial de pueblo señalado con el halo divino de la magnificencia y el reconocimiento más exquisito que llena de orgullo los hogares de cientos de pamplonicas.

Pamplonicas que, cada año que pasa, aprovechan para escapar de la catarsis festiva en busca de un lugar no invadido por alcohólicos desaforados ni cientos de miles de energúmenos incontrolables venidos de los confines más salvajes del planeta, donde se pueda beber civilizadamente unos tragos sin dejarse los ahorros de todo el año y dormir sin bombos, tambores, verbenas, dianas, megafonías, jaranas, fanfarrias, txalapartas y berridos
amenizantes de sol a sol.

Podría decirse que los sanfermines han muerto de éxito. No sé como cada 15 de julio no declaran el casco viejo zona catastrófica.

Suyo, afectadísimo: Juanito Monsergas

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