DECÁGOLO o JURAMENTO HIPOTÉTICO
1.- Evita el “doctor ando...”. “¿Qué tal estás?” es una pregunta retórica: a estas alturas todos tenemos enfermedades, achaques, goteras, visitas médicas... y sí, cada día que pasa descubrimos una parte más de nuestra anatomía, pero no nos lo cuentes en tiempo real. Y termina las frases.
2.- Procura no hablar con el televisor, es tóxico y deberías de reducir su consumo. Lo mismo que las redes sociales donde todos los tontos tienen altavoz.
3.- No acumules cosas inservibles ni llenes la casa de basura y por favor tira todos los cables de no se sabe qué aparatos acumulados en los últimos treinta años.
4.- Tras una larga experiencia sabemos que la sabiduría te persigue: corre y no dejes que te alcance.
5.- No te empeñes en recuperar la energía y capacidad de tu juventud o conseguirás lesionarte.
6.- Ante las adversidades puedes pensar o rezar... y esto último es de una eficacia probada.
7.- Sabemos que en tu juventud todo era mejor... menos todo lo que ha mejorado: o sea todo.
8.- No te repitas. Insisto, no te repitas.
9.- Procura llegar al final del día por tu propio pie: cuidado con el pimple.
10.- Y por último y más importante: la memoria... Por cierto ¿sabe alguien dónde he olvidado a mis nietos?
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