sábado, 4 de abril de 2020

DUDAS Y NECESIDADES



En estos días confusos en los que se empeñan en darnos cifras de contagiados sin saber cuántos hay, puesto que no se hacen pruebas de diagnóstico ni a los asintomáticos ni a quienes los presentan, que nos tratan como a niños sin querer decirnos hasta cuándo vamos a estar encerrados, que el gobierno saca el ejército a la calle para combatir al microbio, que a quien se salta el confinamiento se le reduce como si fuera Jack el Destripador y que las mascarillas caseras pasan de ser una muestra de solidaridad a considerarse inútiles para acabar siendo obligatorias para toda la población, aunque de manufactura autónoma...

“Quédate en casa” nos repiten y repetimos como mejor manera de colaborar en evitar el contagio del nuevo virus. Ahora más que nunca necesitamos una casa y no todo el mundo, ni siquiera en nuestra civilización occidental, la tiene. No me cabe la menor sospecha de que los bancos, que tan generosamente han sido rescatados, no tendrán ningún inconveniente en ceder sus propiedades embargadas al Estado para que se haga una gran Banco de Viviendas Sociales. ¿Desconfía alguien de que la iglesia católica pondrá también todos sus seminarios, residencias y locales eclesiásticos a disposición de los necesitados?

La crisis económica que vamos a tener que afrontar cuando se vuelva a la actividad va a dejar a muchas personas sin recursos indefensas. Confío plenamente que, los adinerados y los titulares de cuentas en paraísos fiscales, que tan generosos y solidarios se han mostrado en esta crisis sanitaria, no vacilarán en recortar un poco sus plusvalías para garantizar una renta básica para toda la población.

Ahora más que nunca se hace necesario estar conectados a través de internet, fomentar la comunicación en las redes, el teletrabajo, la educación a distancia, el comercio online... ¿Alguien duda de que la administración suplirá esta necesidad poniendo en todos los hogares una conexión a internet gratuita y un dispositivo a cada uno de nosotros para que nadie quede aislado?

Y hablando de todo un poco... ¿Cuál es el sueldo de un héroe?

Suyo, afectadísimo: Juanito Monsergas

1 comentario:

  1. Creo que esto también ha sido un sueño como el de la lámpara de aceite

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