sábado, 28 de marzo de 2009

CÓMPLICES


Para la actual jerarquía católica, con su anticristo a la cabeza y sus hordas sinfundamentalistas totalitarias e intransigentes haciéndole el coro, no hay distinción entre embrión, feto y bebé.

Aún a sabiendas de que el ser humano nace prematuramente fruto del bipedismo y la encefalización excesiva, pretenden otorgar el carácter de ser humano al óvulo fecundado, confundiendo perversamente individuo con nonato e incluso con el principio, informe todavía, de una cosa.

El depravado discurso en la (supuesta) defensa de la vida, se muestra como enfermiza apología de agónicos y no nacidos en detrimento de las personas en pleno uso de sus derechos y propiedades. Llama la atención así mismo su interés por alargar el sufrimiento de los moribundos a los que niegan el derecho a morir en paz y decidir en la postrera etapa vital.

Su desmedido autoritarismo, soberbia y fanatismo no se conforma con la propia obcecación y ambicionan imponer su sinrazón tanto a propios como extraños.

Y yo me pregunto ¿Qué hacen los creyentes que no se rebelan contra estos asesinos de la razón, sicarios del sufrimiento y verdugos de la inteligencia? No pueden callar eternamente sin convertirse en cómplices del criminal desatino.

Suyo afectadísimo: Juanito Monsergas

1 comentario:

  1. Es increíble el autoritarismo y su proselitismo de lo más tenaz, incluso con los que hace años que no tenemos ganas de escucharles.
    Me encantaría que en las clínicas donde se practica el aborto se pasaran encuestas sobre la confesionalidad de las mujeres que han decidido abortar....creo que la propia Iglesia se llevaría alguna sorpresa....
    Sería el momento de que se plantearan aprovechar esos espacios dominicales para sus mítines ( que ya no son sólo sermones)y a los que preferimos salir al campo o a la playa nos dejaran en paz....que la paz sea entre nosotros, por dios ferran

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